Conmemorando un aniversario de la partida de Giovanni Pico della Mirandola (QEPD. 17 de noviembre de 1494), un hombre de la modernidad, comparto estos escritos que resumen parte de su valiosa obra.
Este humanista y filósofo italiano, estudió derecho en la Universidad de Bolonia y en los más importantes centros de Italia y Francia. En pleno auge del Renacimiento, publicó en Roma sus célebres novecientas tesis, tituladas Conclusiones philosophicae, cabalisticae et theologicae (1486). En ellas manifestó la intención de demostrar la verdadera naturaleza del cristianismo, considerándolo como el punto de confluencia de todas las tradiciones filosóficas anteriores, incluidas la filosofía griega, la astrología, la cábala y la magia. Sus teorías fueron combatidas duramente por la curia romana y trece de sus tesis fueron condenadas por los teólogos de la época, motivo por el cual fue perseguido por hereje y pasó tres meses encerrado en la torre de Vincennes. Tras ese período, se encomendó a la protección de Lorenzo el Magnífico, en Florencia. En 1489 publicó Heptaplus, comentario cabalístico sobre el libro del Génesis, y en 1492 De ente et uno, una crítica al platonismo de Ficino.
Giovanni Pico della Mirandola
Autor: Carlos Goñi Zubieta
Giovanni Pico della Mirandola, Conde de Concordia, es el prototipo de hombre del Renacimiento. En una época de cambios profundos, en una época en la que la historia corría más deprisa que los hombres, en una época marcada por lo nuevo, hacía falta un joven audaz y valiente, capaz de interiorizar, no sin esfuerzo, el tiempo que le tocó vivir. Pico vivió sus 31 años con apasionada intensidad, razón por la que su corta vida le deparó éxitos y fracasos, amores y desamores, momentos de euforia y de paz, calumnias y amistades, envidias y reconocimientos… Es la factura que tuvo que pagar por ser un hombre de su tiempo.
En Pico se entrecruzan la Escolástica y la Modernidad, la Religión y la Filosofía, la Retórica y la Ciencia, la nostalgia caballeresca y el honor nobiliario. Pero es un cupidus explorator, como él mismo se autodenomina, un amante de la verdad y un incansable defensor de la concordia de los saberes. Eugenio Garin, uno de sus comentadores más importantes, califica su obra como un «canto de paz» en los albores de la modernidad, un intento de síntesis entre la pia philosophia y la docta religio.
Pico pertenece a ese humanismo creador del siglo XV —no al humanismo de gabinete del XVI— por varias razones.
Porque tuvo la osadía de convocar un gran “concilio filosófico” y presentar en Roma 900 tesis para ser disputadas. Porque con la Oratio, que debía introducir las tesis, fue capaz de trasladar el humanismo filosófico y retórico al plano metafísico del hombre creador. Porque llevó a cabo en su Heptaplus toda una reinterpretación cosmológica del Génesis. Porque denunció en una inmortal carta a su amigo Ermolao Barbaro los excesos de la retórica hueca. Porque disputó contra las falsas doctrinas astrológicas en sus Disputationes adversus astrologiam divinatricem. Porque buscó incesantemente la “paz filosófica” y la “concordia religiosa” en el De ente et uno. Porque supo compartir, como pone de manifiesto su Commento ai Salmi y su Commento al Pater Noster, los intereses mundanos con la interioridad profunda de la fe. Porque, en definitiva, resucitó el eterno tema del amor con singular belleza en su Commento alla Canzone d'amore. Por todo ello, no extraña que Tomás Moro considerara a Pico paradigma del hombre moderno.
Referencia: Philosophica
Giovanni Pico della Mirandola
First published Tue Jun 3, 2008; substantive revision Wed Aug 3, 2016
Giovanni Pico della Mirandola (1463–94) is, after Marsilio Ficino, the best known philosopher of the Renaissance: his Oration on the Dignity of Man is better known than any other philosophical text of the fifteenth century. Pico was also remarkably original—indeed, idiosyncratic. The deliberately esoteric and aggressively recondite character of his thought may help explain why Renaissance philosophy has had so small a place, until recently, in the canonical history of the discipline as accepted by Anglophone philosophers.
Referencia: Enciclopedia Stanford
Giovanni Pico della Mirandola
The most important Renaissance Platonist was Marsilio Ficino (1433–1499), who translated Plato’s works into Latin and wrote commentaries on several of them. He also translated and commented on Plotinus’s Enneads and translated treatises and commentaries by Porphyry, Iamblichus, Proclus, Synesius, and other Neoplatonists. He considered Plato as part of a long tradition of ancient theology (prisca theologia) that was inaugurated by Hermes and Zoroaster, culminated with Plato, and continued with Plotinus and the other Neoplatonists.
Like the ancient Neoplatonists, Ficino assimilated Aristotelian physics and metaphysics and adapted them to Platonic purposes. In his main philosophical treatise, Theologia Platonica de immortalitate animorum (Platonic Theology on the Immortality of Souls, 1482), he put forward his synthesis of Platonism and Christianity as a new theology and metaphysics, which, unlike that of many Scholastics, was explicitly opposed to Averroist secularism. Another work that became very popular was De vita libri tres (Three Books on Life, 1489) by Ficino; it deals with the health of professional scholars and presents a philosophical theory of natural magic.
One of Ficino’s most distinguished associates was Giovanni Pico della Mirandola (1463–1494). He is best known as the author of the celebrated Oratio de hominis dignitate (Oration on the Dignity of Man), which is often regarded as the manifesto of the new Renaissance thinking, but he also wrote several other prominent works. They include Disputationes adversus astrologiam divinatricem (Disputations against Divinatory Astrology), an influential diatribe against astrology; De ente et uno (On Being and the One), a short treatise attempting to reconcile Platonic and Aristotelian metaphysical views; as well as Heptaplus (Seven Days of Creation), a mystical interpretation of the Genesis creation myth.
He was not a devout Neoplatonist like Ficino, but rather an Aristotelian by training and in many ways an eclectic by conviction. He wanted to combine Greek, Hebrew, Muslim, and Christian thought into a great synthesis, which he spelled out in nine hundred theses published as Conclusiones in 1486. He planned to defend them publicly in Rome, but three were found heretical and ten others suspect. He defended them in Apologia, which provoked the condemnation of the whole work by Pope Innocent VIII. Pico’s consistent aim in his writings was to exalt the powers of human nature. To this end he defended the use of magic, which he described as the noblest part of natural science, and Kabbalah, a Jewish form of mysticism that was probably of Neoplatonic origin.
Referencia: Enciclopedia de Filosofía